top of page
Buscar

Brindis espumante busca crear la prenda de la temporada dandole una nueva mirada a la industria

  • Foto del escritor: fortuna uade
    fortuna uade
  • 2 jul 2023
  • 8 Min. de lectura

Magui, tere y feli son tres hermanas que durante la pandemia decidieron comenzar un proyecto de moda slow fashion @b_rindis el cual se destaca por sus estampas únicas y su idea de pensar a la moda desde otro ángulo.

Si bien solo Feli había estudiado algo referente a la moda en sus estudios terciarios, cuando se les ocurrió formar Brindis, Tere y Magui no dudaron en tomar la oportunidad y aprender del oficio.



“Somos un proyecto familiar que surge como una opción alternativa a la industria de la moda. Apostamos a una producción humana y consciente, realizada en nuestro país y aspiramos al crecimiento de esta sin perder nuestro origen”



Por lo que vi en sus redes sociales, ustedes empezaron este proyecto en medio de la pandemia. ¿Cómo surge todo esto en un contexto donde estamos todos en casa?


Magui: Con Feli habíamos hecho un par de proyectos como más chicos antes de este, bueno, hacer 10 camisas intervenidas venderlas en una feria o como cosas más chiquitas. Y estábamos las tres en casa muy aburridas y dijimos bueno hagamos unas remeras medio por diversión, como por hacer algo.


Tere: Claro, y ahí arrancó dijimos está bueno lo que hicimos y de repente se empezó a vender, vender, vender y bueno, como también Feli era del mundo de la moda y trabajaba ahí era como, bueno, salir a comprar telas aunque estaba todo cerrado, tenías que ir a once y tocar la reja y que atendían como medio así en secreto y bueno, y así medio que arrancó.


Ví que al principio eran cosas más clásicas, un buzo afelpado sin estampado por ejemplo, y de repente pasan a algo completamente distinto que son lo que venden ahora con las telas diseñadas con texturas. ¿Cómo hacen ese cambio de algo más clásico a esto?


Magui: Yo creo que nunca nuestra idea fue ser clásicas. Nunca fuimos muy clásicas siempre que hicimos algo intentamos buscar algo distinto y que no se vea y que no esté en ningún lado y nos pasaba eso que por ahí queríamos hacer, algo con distintas telas. Nos encontramos que a ninguna nos gustaban las telas del mercado con ningún estampado y el año pasado o anterior, salimos con unas camisas que teníamos la posibilidad de estampar como toda la tela. Y empezamos bien a diseñar y hacemos todas las estampas. Como con ese objetivo de encontrar algo que nos guste que no lo estábamos encontrando como en el mercado de telas que había acá.


Tere: Sí, también de repente nos dimos cuenta que a la gente como que le copaba eso de encontrar algo que no se comprará en otro lado. Entonces, como también a partir de ahí, dijimos, bueno, como que la gente no va a venir a buscar como una típica remera o algo así sino que viene a buscar otras cosas.

Entonces también por en base a lo que la gente quiere, como consume nuestra marca como nada, seguimos un poco ese camino de hacer cosas como más distintas o que vas y te comprás como una prenda que va a hacer como la prenda de la temporada.


Justamente la siguiente pregunta tiene que ver con esto de las temporadas y las tendencias. ¿Cómo trabajan el tema de las tendencias siendo una marca de slow fashion? ¿Ustedes trabajan con esto o simplemente no le dan importancia?


Magui: Siento que esto está un poco relacionado a esto de que, como no venimos del mundo de la moda, tampoco estamos tan relacionadas con todos esos códigos o como estructuras que tienen ese mundo.

Si hacemos una sección, como unas estampas de verano y unas estampas de invierno, pero vamos sacando productos cuando de repente. Tal vez estoy cortando algo y se me ocurrió hacer otra y lo sacamos como que no es que las colecciones o las temporadas son tan estructuradas. Sino que vamos sacando cosas según lo que se nos va ocurriendo de repente, no hay como una estructura de producción tan encerrada.


Tere: Y eso sí, no, no trabajamos como mucho, como por temporada, osea sí, obviamente nos armamos como por lo que obviamente en verano se consumen más remeras y en invierno se consume más campera, etc. Vamos más o menos con eso, pero también jugamos con otras cosas en el medio. Y no es que lo que armamos queda así y va a ser así, sino que va aumentando y va cambiando, dependiendo qué funciona y que no, claro. Y de repente por ahí ahora tenemos todavía no sé, cosas del verano y se siguen vendiendo y nada las dejamos en la página, no es que cambiamos toda la como la página.


¿Qué es lo que los diferencia de las otras marcas que están trabajando en la misma industria del slow fashion?


Magui: Creo que no sé si buscamos tanto diferenciarnos, siento que todos los que conocemos hacen lo mismo, lo crean a su manera. Hay re buena onda, de hecho, por ahí colaboramos con algunas marcas y todo. No sé si buscamos cómo diferenciarnos, pero creo que lo que más nos diferencia es hacer nuestras propias estampas, que eso no lo hacen muchas marcas. Y después también como por ahí generar como de brindis algo más que una marca de ropa, que sea más como un concepto y un lugar donde estamos dando talleres, hacemos eventos también ferias, nada donde pasan más cosas que simplemente comprar ropa


Sobre los desperdicios textiles de la producción, viendo que ustedes están produciendo la ropa, ¿qué pasa con los desperdicios a la hora de los cortes? ¿Los reutilizan?


Tere: Lo que nosotros hacemos a medida que vamos cortamos va a unos canastos que cada dos semanas o tres semanas, todos esos retazos se cortan en cuadrados o rectángulos, y los dividimos por color o por tela. Y eso se lo mandamos a una costurera que nos da como una nueva tela con ellos y bueno, eso lo volvemos a usar para cortar y así sin fin.

Obviamente que hay pedazos, o sea, como todo lo más chiquito que eso sí se descarta. Pero bueno, como la búsqueda es, intentemos tirar lo menos que podamos, como eh, y después como la otra forma, quizás de no generar tanto desperdicio es trabajando por encargo.

Nosotras no producimos stock, solamente lo poquito que tenemos que hay en el local que es para que la gente pueda venir a aprobarse y eso. Sino que hacemos lo que se compra, lo que se consume entonces, de esa forma buscamos no generar desperdicio.



¿Qué ven qué está pasando actualmente con la moda en argentina? ¿Ustedes creen que hubo un cambio a partir de la pandemia? ¿Qué piensan qué está pasando actualmente con la moda con fashion con avellaneda con todo lo que es distinto a ustedes?


Magui: Justo al otro día, hablábamos de esto que creemos que quizás de algunas formas se está dividiendo,ósea si bien el slow fashion también está creciendo cuando se terminó la pandemia se terminó como ese tiempo más lento y como volvemos de nuevo a un acelere o al fast fashion.

Entonces, no sé, se está formalizando en el consumo que haya mucha gente que le gusta el slow fashion y empiece a consumir de esa forma y eso está creciendo.


Tere: Seguimos viviendo en un sistema capitalista predominante que también a nosotras nos pasa por ahí que lo vemos más. Y como lo tenemos más en la cabeza y todo porque nos movemos por determinados ambiente con determinada gente, hay que ver que pasa también con ese tipo de moda o consumición de este en otros lugares de país fuera de capital o también algo que está súper centralizado acá que está pasando acá y que no sé si está pasando mucho en otros lugares del país porque bueno, también, obviamente, tienen otros tiempos y otra otros procesos.

Un producto de Avellaneda es mucho mas caro que un producto hecho a mano Entonces es un privilegio también consumirlo. Creo que están esas dos tendencias y como las dos son muy distintas entre sí. El slow fashion tiene un público muy reducido desde el inicio, que obviamente sí fue creciendo después de la pandemia.


Magui: No sé como que yo pienso hoy que quizás la gente antes de la pandemia consumía otro tipo de cosas que hoy no cosume, por ejemplo a mí no me llama la atención ir a consumir a un shopping. Y creo que hay mucha gente acá en capital, sobre todo, pero que sí empezaron a consumir mucho más slow fashion.


Algo que también vi es que ustedes también hacen su propia packaging.


Magui: Empezamos haciendo nuestro propio packaging, hacíamos las bolsas pero hoy ya no, no nos daban los tiempos para poder hacerlo.

Así que tenemos unas bolsas que tienen una estampa hecha por nosotras pero bueno, eso sí ya lo mandamos hacer. Arrancamos haciendo todo, literalmente todo lo que había que hacer para tener una prenda y venderla y de a poco hay cosas que vamos delegando.

Algunas cosas también nos las corta Max, que es el cortador que trabajaba con nosotras.

Vamos encontrando personas que nos van ayudando, porque si no era imposible poder crecer solo las tres



A medida que va avanzando el proyecto, algo que que veía en la página de Brindis es que ustedes hablaban mucho de poder crecer sin perder los valores del inicio. ¿Cuál es su segmentación del público? ¿Quién es la persona ideal que consumiría la marca?


Tere: Tenemos un rango de edad o menos que es como gente entre los dieciséis y veintipico. La idea es como nosotras pensábamos en cómo se vestiría un sujeto urbano medio canchero cool. Pero a la vez que se sienta cómodo con lo que está usando sin tener que estar incómodo por la moda y lo hacemos a partir de las cosas que nosotras podamos usar, cosas que nosotras nos gustan, cosas que nos gustaría ver.


Magui: Sí, creo que también está muy relacionado con lo que nos gusta a nosotras tal vez vi algo en la calle y decir “che no se, vi esto”. Alguien con alguna prenda que me gustó, digamos una pollera, así como mucho de lo que nos gusta a nosotras. Y en base a eso, ir produciendo como si fuese para nosotras.


Tere: Después eso de los valores de la marca, eso de que hablamos de intentar no perder esa forma de producir tiene que ver con esto que te decía de bueno, nosotros no mandamos a talleres a coser en grandes cantidad de tela, sino que fuimos armando vínculos con distintas personas qué son los que nos ayudan a trabajar.

Entonces hay cuatro o cinco costureras que trabajan con nosotros hace dos años y que les mandamos trabajo todas las semanas y que tenemos un vínculo con ellas y que sabemos cuánto ganan por cada cosa que hacen y cuidar también esa parte como más humana de la producción que hay muchas veces que, cuando hay mucha producción, tomando un taller, no sabes cuánto paga el dueño del taller a la persona que está cosiendo o cuáles son las condiciones de trabajo.

Y eso genera vínculos también con otras personas que son como familia, un poco esos son nuestros valores también como seres humanos, seguir trabajando de la manera más humana y más consciente y ser cuanto menos mierda que podamos ser como.


También me da mucha curiosidad el tema de las estampas, ¿cómo las arman? ¿Ustedes sacan las fotos?


Magui: Se fue poniendo los últimos años por ahí una temática. Y en base a eso, hacemos las estampas. Vamos agarrando muchas fotos y después es un collage de fotos recortadas y se va armando.

Y con eso armamos todas las estampas para el verano, ponemos alguna temática o disparador que nos funciona a nosotras o que nos guste a nosotras.


En conclusión se puede decir que Brindis es el futuro de la moda en el slow fashion, nos da otra visión de cómo uno se puede sumergir un mundo de la moda desde una mirada artística, haciéndolo un proyecto que sea más que una marca, y además intentando hacer un mundo mejor cuidando los desperdicios de la producción.



 
 
 

Comentários


bottom of page